Conoce a Alejandra Segura Rios, Dircom que impulsa la Diversidad, Equidad e Inclusión en el mundo empresarial
Cuando era pequeña, Alejandra Segura Rios, Alumni UPC de la Escuela de Postgrado, solía preguntarle a su madre por qué se le servía más comida a los hombres de la familia que a ellas y por qué no eran equitativos con todos y todas. “Siempre estaba pendiente de esos detalles y era muy crítica al respecto”, dice. En aquel entonces, todos pensaban que de grande sería abogada, porque la veían como una justiciera. Sin embargo, no fue así, pues eligió una carrera completamente diferente, más orientada al arte y al diseño empresarial. No obstante, ya en el campo laboral, ese espíritu justiciero que su madre reconoció en ella, cuando aún era niña, terminó por alcanzarla y definir el rumbo de su vida.
El camino tradicional para los diseñadores gráficos —apunta Alejandra— es trabajar en agencias de publicidad o departamentos de marketing. No obstante, sea destino o casualidad, ella comenzó como practicante en el área de Comunicación Interna de una cadena de centros comerciales. Esta primera experiencia laboral fue determinante para Alejandra, pues hasta entonces no sabía que su trabajo como diseñadora podía tener un propósito social, y no solo comercial. “¡Descubrir eso, me encantó!”.
Un propósito para toda la vida
Más tarde, en 2017, ingresó a trabajar a Telefónica como ejecutiva asociada de Clima y Cultura, una oportunidad que terminaría por darle un propósito personal y profesional. Al principio, su función era diseñar piezas gráficas para comunicación interna. Un día, sin embargo, la responsable de Diversidad, Equidad e Inclusión le pidió que le ayudara con unos diseños para una campaña de empoderamiento femenino. “No solo lo hice con gusto, sino que me ofrecí a seguir colaborando en este tipo de iniciativas con impacto social, sin imaginar que meses más tarde me retarían a encargarme de ese programa”.
¿Diversidad, equidad e inclusión? De un día para otro, descubrió que el programa no solo se trataba de hacer campañas de comunicación, sino que incluía muchas otras cosas, como representar a las empresas, tomar decisiones importantes, tener indicadores claros, medir resultados, y que todo aquello tenía un impacto directo en la reputación organizacional. “Por tanto, había que ser coherente con lo que se decía y se hacía”.
La comunicación es una herramienta súper poderosa y la clave del éxito en cualquier iniciativa. Pero, la comunicación con propósito es fundamental para la transformación del país.
¡A vencer los temores y creérsela!
En aquel entonces —explica— eran pocas las organizaciones que abordaban estos temas y Alejandra, que apenas estaba aprendiendo, no estaba segura de poder hacerse cargo. Tenía 26 años en ese momento y reconoce que no fue sencillo. “Y es que cuando empiezas a participar en espacios externos de trabajo o debate, con líderes de otras empresas, gerentes y directores, puedes llegar a sentirte vulnerable. No solo porque subestimes tus capacidades, sino también porque sientes que no cumples con ciertos estereotipos, que no encajas entre los demás y que no te tomarán en serio. Todo eso te lleva a pensar que tal vez no podrás lograr la misión que te han encomendado”.
¡Todo líder necesita preparación!
Sin embargo, asegura que sus superiores le dieron toda la confianza que necesitaba y se propuso dar lo mejor de sí. “Empecé a sentirme empoderada y a creérmela”. Fue durante esta etapa que decidió estudiar la Maestría en Dirección de la Comunicación Empresarial (DIRCOM) en la Escuela de Postgrado de la UPC, pues tenía claro cuál era su propósito profesional, pero sentía que necesitaba prepararse y adquirir una base más profunda. “La DIRCOM, con esa amplia gama de contenidos, aquella visión holística de las comunicaciones y la calidad de sus docentes, me brindó las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos y seguir creciendo en este campo que tanto me apasiona”.
Desde entonces, esa preparación le abrió nuevas oportunidades de desarrollo profesional. De Ejecutiva Asociada, pasó a Ejecutiva Senior. Y más tarde, en 2023, tras la regionalización de Telefónica que agrupó a ocho países de Hispanoamérica, se convirtió en Project Leader de Experiencia del Empleado de la región, acompañando actualmente al equipo de Ecuador en los temas relacionados con clima, cultura, diversidad y formación de los colaboradores. Es un reto emocionante —sostiene— porque para ayudarlos a desarrollarse es fundamental entender cosas tan básicas como sus necesidades y situaciones tan complejas como el contexto en el que viven o la situación política de su país.
La DIRCOM, con esa amplia gama de contenidos, aquella visión holística de las comunicaciones y la calidad de sus docentes, me brindó las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos y seguir creciendo en este campo que tanto me apasiona.
¡La misión no termina!
Y, por otro lado, ha tenido la oportunidad de participar en varios espacios para seguir impulsando la diversidad, equidad e inclusión, como en la Cámara de Comercio de España en el Perú y en la Cámara de Comercio Americana del Perú (AmCham), donde en algún momento llegó a ser Vicepresidenta del Comité de Diversidad e Inclusión por votación, con la misión de promover buenas prácticas entre las empresas del país.
Sin embargo, señala que todavía hay mucho por hacer, tanto desde el sector empresarial como el gubernamental, sobre todo en el Perú. “Hay países como Argentina, Colombia y Uruguay que han avanzado bastante en temas de diversidad, equidad e inclusión, pero nosotros todavía tenemos mucho trabajo por delante. Necesitamos vencer barreras culturales, re-educarnos y promover más políticas públicas”.
¡A comunicar con propósito!
No obstante, Alejandra cree que si todos los sectores trabajan juntos se pueden lograr grandes cosas. Por ejemplo, una de las iniciativas que desarrolló en Telefónica fue “Mujeres en red”, un programa que busca incrementar la participación de mujeres en las labores técnicas tradicionalmente masculinas del sector de las telecomunicaciones. La iniciativa tuvo tal impacto que incluso hizo sinergias con el programa Aurora del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), cuyo objetivo es empoderar a las mujeres a fin de prevenir y erradicar la violencia de género. “El proyecto, que inició en 2020, tuvo 20 beneficiarias en su primer año, pero a la fecha ya son más de 400 en 12 regiones del país”. Por si fuera poco, el programa se ha expandido también a Colombia.
Alejandra afirma que su ruta profesional, hasta hoy, le ha demostrado que la comunicación es una herramienta súper poderosa y la clave del éxito en cualquier iniciativa, ya sea un diseño o una campaña social. Pero, la comunicación con propósito —dice— es fundamental para la transformación del país. “Desde mi sector, seguiré luchando por un Perú más equitativo, respetuoso y justo”, apunta Alejandra Segura.