Las universidades privadas peruanas contribuyen al crecimiento económico del país

A partir del “Estudio de contribución económica de la educación privada en el Perú” realizado por Apoyo Consultoría, preparado en junio del presente año para FIPES (Federación de Instituciones Privadas de Educación Superior), se analiza el importante rol que la educación privada cumple en el Perú.

El Ministro de Educación, Juan Cadillo, comentó en la presentación de este informe, organizado por FIPES este 2 de setiembre, lo siguiente: “La educación en nuestro país es un elemento clave para combatir las inequidades y mantener una igualdad y sostenibilidad a lo largo del tiempo. En ese sentido, debemos reconocer y alentar la educación privada, así como la educación pública.”

Durante los últimos 30 años, las universidades privadas se han sumado a la oferta educativa pública, generando así mayores oportunidades para que más peruanos accedan a la educación superior. De la misma manera, las universidades privadas han logrado ampliar el alcance geográfico de la educación superior a nivel nacional, democratizando la educación. En específico, las universidades societarias han creado nueva oferta educativa universitaria en los distritos periféricos de Lima Metropolitana.

En el año 2019, el 32% de alumnos matriculados a nivel nacional provenían de una institución educativa privada. Esto significó que la contribución del sector privado al PBI fuera de S/13 mil millones, lo que equivale a 60% del PBI del sector y 2% del PBI total de ese mismo año.

A pesar de la existencia de ciertos mitos, como que las universidades privadas no tienen el interés de mejorar la calidad del servicio educativo; en la práctica, las universidades privadas son reconocidas en rankings internacionales con desempeños sobresalientes, como se ve reflejado por ejemplo en el último QS World University Rankings con la presencia peruana de 5 universidades privadas y 2 universidades públicas.

En aras de la calidad, las universidades privadas ofrecen opciones de carreras más especializadas y modalidades de estudio más flexibles, favoreciendo a aquellos que desean trabajar y estudiar a la vez. Asimismo, los egresados de las universidades privadas tienen un salario 5% mayor a los de universidades públicas, lo cual reta al sector en general a garantizar una auténtica “calidad” a través del licenciamiento y acreditación de programas, de esta forma, los estudiantes podrán mejorar su nivel de empleabilidad en el mercado laboral.

Un dato interesante del estudio es que la educación superior privada impacta 3 veces más que la educación pública en el crecimiento económico del país. En el 2019 la recaudación de impuestos del sector de educación ascendió a S/1.2 mil millones, con lo cual se podría financiar 3 programas sociales de la envergadura del “Programa Nacional Cuna Más” y más de 3 mil kilómetros de carreteras. Por otro lado, brinda trabajo a alrededor de 228 mil docentes en todo el país generando una importante plaza de empleo en el sector.

Todos estos factores que propone el sector educativo superior privado fortalecen la educación en el Perú y contribuyen en mayor medida a los avances económicos desarrollados en el país.