LARA: Escuela señas que contribuye con la inclusión de las personas con discapacidad auditiva
Moisés es un joven creativo y perseverante. Nacido en Cusco, en agosto de 1990 y acentuado en Arequipa, desde 2007, se describe a sí mismo como una persona visionaria, innovadora y ampliamente comprometida con las comunidades más vulnerables; por ello, creó LARA, una escuela arequipeña de lengua de señas, cuyo propósito es contribuir con la inclusión de las personas con discapacidad auditiva, mediante la enseñanza de la lengua de señas, con el desarrollo de clases presenciales, virtuales y vivenciales, dirigida tanto a personas con discapacidad auditiva como al público en general.
LARA fue fundada en el 2014, en el garaje de una iglesia ubicada en Arequipa, inspirándose en la historia de su cofundador, Esteban Ramírez, cuyos padres tienen discapacidad auditiva. “LARA son los iniciales de Luis Alberto Ramirez Arellan, papá de Esteban, mi socio. Sus dos padres son personas con discapacidad auditiva. Él, desde muy niño, aprendió a comunicarse en lengua de señas gracias a su papá. Debido a nuestra necesidad de comunicarnos, tanto él como su padre fueron nuestros primeros maestros, por lo tanto, en su honor, le colocamos a nuestra escuela el nombre LARA. Para nosotros, todo inició cuando un sacerdote nos brindo un pequeño espacio dentro de la Iglesia, con la finalidad de ayudar a las personas sordas a aprender la lengua de señas, leer y escribir. Poco a poco, llegaron más personas con o sin discapacidad auditiva a estas clases. En ese momento, notamos que debíamos enseñar esta lengua a las personas oyentes y así cerrar la brecha existente en la comunidad. Desde ese momento, notamos que debíamos ampliarnos a un público mucho más amplio, en función de disminuir dicha brecha lo más posible”, sostuvo Moisés Chañi.
Un año después, tras mucho esfuerzo por parte de Moisés y Esteban, LARA comenzó con el dictado de la lengua de señas, en un local propio, a adolescentes, jóvenes y adultos en tres niveles: básico, intermedio y avanzado. Asimismo, también iniciaron con el dictado este curso en las escuelas. “Si cada uno de los niños con discapacidad asistiera a las escuelas, al menos uno hubiera sido tu compañero, por ello estamos ampliamente comprometidos con nuestro propósito: la inclusión de las personas con discapacidad auditiva mediante la enseñanza de la lengua de señas a través de nuestra educación b learning, es decir, que dictamos tanto de manera virtual, como presencial”, mencionó el cofundador de LARA.
En estos 5 años, LARA ha beneficiado a más de 3800 personas de forma directa, quienes son los alumnos matriculados en las clases. Asimismo, han impactado de manera positiva en más de 22800 personas más. “Estimamos que cada alumno nos ayuda a impactar a 6 personas más, debido a que nuestros alumnos son docentes, abogados, futbolistas, enfermeras, doctores y padres de familias; de acuerdo a su labor profesional, cada alumno impacta indirectamente de formas distintas”, sostuvo Moisés.
Sus ejes de acción:
Además de contar con dictado de clases, bajo las modalidades virtual y presencial, antes de la pandemia, LARA, brindaba clases vivenciales en la Asociación de Sordos de Arequipa. Cabe resaltar que todos los profesores de LARA tienen discapacidad auditiva, además de tener, como lengua materna, la lengua de señas.
Entre otras actividades, LARA capacita a empresas a través lengua de señas. “Si un sordo trabaja en una empresa, capacitamos a sus compañeros, puesto a que esto es muy importante para garantizar su inclusión y la comunicación efectiva entre él y los demás colaboradores”, manifestó Moisés. Asimismo, los docentes de LARA, a modo de apoyo, se desempeñan como intérpretes en la Defensoría del Pueblo.
Adicionalmente, esta escuela de lengua cuenta con actividades de voluntariado. “Gracias a nuestros estudiantes, realizamos un voluntariado, que se basa en apoyar a la comunidad de sordos en la tutoría e interpretación de lengua de señas. Nosotros nos enfocamos en los niños, por lo cual nos convertimos en sus intérpretes en las sesiones escolares. Es una actividad muy enriquecedora tanto para el voluntario como para el beneficiario, debido al lazo creado entre ambos”, mencionó el cofundador.
Actualmente, debido a la pandemia, el cuerpo docente de LARA, además de brindar clases virtuales, participa Aprendo en Casa como intérpretes de clases, cuentos, videos, entre otras actividades en Aprendo en Casa, siendo este uno de sus logros más destacados. Otros de sus logros son ser parte de StartUp Perú 7G y contar con la presencia de alumnos latinoamericanos en sus clases virtuales.
Sus planes futuros:
Sus metas a futuro son, principalmente, ser la primera escuela superior en el Perú, que, aparte de enseñar Lengua de señas, certifique, valide y respalde a los alumnos con discapacidad auditiva que posean alguna profesión, con la finalidad de apoyarlos en el campo laboral. “Tenemos un sueño: queremos tener nuestro propio instituto de lengua de señas y poder contar con carreras certificadas para personas con discapacidad auditiva. Además, soñamos con crear “Open Lara”, el equivalente a «Open English», pero de lengua de señas, en la cual nuestros propios docentes capaciten a personas de todo el mundo en esta temática. Soñamos con una sociedad sin barreras de comunicación, una sociedad más inclusiva, que posea igualdad de oportunidades para las personas sordas”, mencionó Moisés Chañi, denotando su gran motivación y compromiso con poder hacer de este mundo un lugar mejor.
Te invitamos a seguir el progreso de Moises y Lara en:
FB: https://www.facebook.com/LARA-Escuela-de-Lengua-de-Se%C3%B1as-596331783817594/
Web: https://larals.com/
Moisés es uno de los diez ganadores de la 10ª. edición de Protagonistas del Cambio UPC 2020. Para conocer más sobre estos emprendimientos sociales y la historia de vida de los demás ganadores, te invitamos a leer nuestros artículos, los cuales podrás encontrar en nuestro fanpage.